Es muy importante la relación entre hermanos para desarrollar su sociabilidad. Gracias a esto desarrollan la simpatía y disminuye el egoísmo, ya que empiezan a compartir las alegrías y las tristezas. Se desarrolla la empatía poniéndose en el lugar del otro teniendo en cuenta sus diferencias.

 

Nunca es una relación perfecta ya que siempre hay desacuerdos que conllevan a peleas. En este caso los padres deben actuar con calma, y utilizar un tono firme y nunca gritos ni bofetadas. Si continua la pelea, hay que separarles y dejar que se calmen sin que se miren ni se hablen, así conseguirán que hagan las paces antes.

A los 5 años esta conducta disminuye ya que son más mayores y lo ven diferente. Verás al hermano como su mejor amigo aunque haya peleas de vez en cuando las cuales tenemos que dejar que ellos sean capaces de solucionar. Cuando estén calmados hay que hablar con ellos para saber que ha sucedido y si se precisa, ayudarles a buscar soluciones.